Jesús resucitó porque nos amó a ti y a mí,
sufrió todo el dolor por amor,
con su muerte y resurrección abrió el camino a la vida eterna
que disfrutaremos con Él en el cielo.
Jesús es el amigo que nunca nos abandona
es fiel a su promesa que dijo:
Yo estoy con ustedes todos los días hasta el fin del mundo.